Panuts: Te enseñamos a catar un vino

noviembre 26, 2021 Panuts: Te enseñamos a catar un vino

Para sacarle mayor provecho a tus vinos, debes aprender cómo catarlos. Hoy te enseñaremos brevemente cómo catar un vino y entenderás mejor los pasos de una cata.

Es recomendable que la cata se realice en un lugar ventilado y bien iluminado. Este evento tiene tres fases: la visual, la olfativa y la gustativa. Estas se relacionan con el sentido de la vista, olfato y gusto, respectivamente.

 

Fase visual

El primer paso en una cata de vino es la observación. Una vez servida la copa, debemos sostenerla por el tallo, inclinarla y ver el color. Esto dará indicios sobre la edad del vino; los jóvenes suelen ser más brillantes, mientras que los envejecidos más oscuros y opacos.

Se denomina vino de capa alta a aquel que no deja ver a través del líquido y vino de capa baja al que es más transparente.

También en esta fase podemos conocer la densidad del líquido que vamos a beber. Al mover un poco la copa, quedarán restos de vino en sus paredes. Si estas “lágrimas” caen rápidamente se trata de un vino menos denso y cuando caen lentamente se trata de uno con mayor densidad.

Además, la densidad indica el grado de alcohol de la bebida. Mayor densidad es equivalente a mayor graduación alcohólica.

Luego de estos pasos, la fase visual ha terminado y se pasa a sentir los aromas del vino.

 

Fase olfativa

En esta fase hay que dejar que el producto entre a nuestras narices.

Los aromas principales son los que aparecerán al oler el contenido de la copa antes de agitarla, generalmente se percibe el olor fuerte a uva o a frutas que se usaron en la elaboración.

Luego, tras agitar la copa ligeramente para que entre en contacto con el oxígeno y pueda desprender más aromas, se aprecian los aromas secundarios. En vinos jóvenes suelen evidenciarse más aromas secundarios que en los envejecidos. En el proceso de elaboración , estos aromas surgen en las dos fermentaciones.

Al seguir agitando la copa, ahora con más energía, despertaremos los aromas terciarios. También se conocen como bouquet y son las más difíciles de adivinar. Estos aparecen en el proceso de crianza de la bebida, es decir, cuando está almacenado en barricas.

Terminado el proceso relacionado al olfato, el vino finalmente puede probarse.

 

Fase gustativa

Cuando el vino llega a la boca se conoce como ataque. Una vez que el líquido está dentro de la boca se debe pasar de un lado a otro e intentar apreciar sus cuatro sabores básicos: salado, dulce, amargo y ácido.

El siguiente paso es analizar su textura, para esto el sentido del tacto entra en acción. Es bueno cuando un vino tiene textura suave o untuosa y malo cuando se percibe rugoso o astringente.

Continuando con la fase gustativa, se analiza la sensación retronasal. Una vez el vino es bebido se debe exhalar por la nariz para determinar si es de larga o corta retronasal. Si las sensaciones perduran, la bebida es de larga retronasal y en caso contrario, de corta.

Para concluir la cata, se evalúa el final que deja el vino en nuestro paladar. Según el tiempo que se mantenga el sabor en el paladar se puede clasificar un vino como corto, mediano, largo o muy largo.

 

Conclusiones Panuts

Catar un vino es más que solo probarlo, las fases olfativa y visual son parte de toda la experiencia. Alentamos a realizar estos tres pasos cuando se tome vino con el fin de conocer mejor tus vinos favoritos y descifrar qué es lo que te gusta de ellos.